El aerolito de Santa Rosa de Viterbo cayó el Viernes Santo de 1810 y al día siguiente fue encontrado por una niña en cercanías del pueblo. El aerolito servía como yunque en la herrería del pueblo en 1827, cuando, dos célebres naturalistas de la época Jean Baptiste Bousingnault y Mariano Rivero, en expedición por el territorio, lo encontraron, lo reconocieron como un aerolito metálico y lo compraron con gran entusiasmo como primera pieza para el Museo Nacional. Sin embargo, debido a su peso de aproximadamente 620 kilogramos, no pudieron trasportarlo a Bogotá.
A partir del reconocimiento por parte de los científicos, el aerolito cobró una importancia especial para las gentes de Santa Rosa. El pueblo le mandó hacer una columna dórica de piedra y lo situó orgullosamente en el centro de la plaza, frente a la iglesia. Allí estuvo hasta 1906, cuando un norteamericano, cazador de meteoros llamado Henry Ward, llegó al país. Venía con el firme propósito de encontrar este aerolito y “salvarlo para la ciencia”. Al verlo en su pedestal, Ward ideó rápidamente un plan para obtenerlo: le propuso al Gobernador de la región un canje…
El Pequeño Museo, da cuenta de momentos claves de una singular cadena de eventos tragicómicos que se desatan a partir de la llegada de Ward y su encuentro con las autoridades colombianas.
Fecha: 20 de octubre al 20 de diciembre de 2018
Hora: 10:00 am a 5:00 pm
Lugar: Nicho Central
Tarifa: Entrada libre.